martes, 17 de septiembre de 2013

¡Viva la Desinformación!


Llevo cuatro días sin leer ni prestar atención a todas las noticias económicas que salen sobre España, Europa, el mundo o el universo, y tampoco estoy leyendo nada sobre sucesos, contaminación ambiental o cualquier cosa que pueda tener trazas sobre lo mal que va el mundo o lo mala que es la humanidad en general; y he de decir que, hacia muuuuucho tiempo que no dormía tan relajadamente, que me emocionaba tanto por los detalles tontos o, simplemente, ser positiva (sobre todo esto último), ya no me costaba tanto..¡casi podría decir qué me salía solo!.

Estos cuatro días, además de dedicarme a mis quehaceres habituales, el tiempo que dedicaba a las noticias en la televisión, aunque me de un poco de cosa reconocerlo, ponía el canal "Divinity" y lo que tocase en ese momento... y oye, ciertamente, esos programas que reforman las casas o los trajes de novias, además de que enganchan, son mano de santo para dejar la mente en blanco y no acordarse ni de la hora en que uno vive. Respecto al tiempo que le dedicaba a la lectura de periódicos como el Faro de Vigo, El País o El Mundo, lo cambié por un libro gordísimo sobre huertas ecológicas que encontré en la pequeña gran biblioteca de mis padres así como a meditar, como diría mi madre, "sobre la muerte del mejillón", es decir, rascarme la tripa e imaginar a media España haciendo cola en el Soho o haciéndome miles de encargos para comprar mis mermeladas o bicas, por supuesto, a esta imagen hay que añadirle mi cara de inocente soñadora mientras mis familiares me miraban con cara ¿y  a ésta que le ha dado? a la vez que hacían aspavientos para sacarme de "los mundos de Yupi" en los que me encontraba....¡ays!...quién pudiera comprar una casa en esos mundos...;). Por su puesto, a esto hay sumarle largas horas contemplando tomates, viendo si los higos crecen a buen ritmo y si las castañas empiezan a caer de los árboles porque, por si nos os habéis dado cuenta, el Otoño esta llamando a la puerta y creo ninguno de nosotros se quiere dar por aludido.

Y hablando de castañas, ¿os apetece que cuándo las tenga, las lleve al Soho Vigo Zona Centro? (y lo mismo con las nueces), son buenísimas, 100% ecológicas y de la tierra ¿qué más se puede pedir? jeje creo que se nota bastante que soy una loca de las castañas, sobre todo si son  asadas y están muy muy calentitas. Supongo que me traen recuerdos de infancia, cuando mi madre se ponía a la cola para comprar castañas asadas a una señora que tenía un "horno"/ "brasas" en forma de tren y que todos los años se ponía en la C/ Príncipe de Vigo; bueno, aún se sigue poniendo y aún sigo yendo a hacer cola con mi santa madre (a pesar de tener cestas llenas de ellas cuando es la época), porque hay "tradiciones pequeñitas" que nunca deben perderse :).



¿Veis como el desconectar del mundo es maravilloso?, los niveles de ansiedad bajan estrepitosamente, vuelves a sonreír con más ganas todavía y esos detalles que hacen la vida bonita y encantadora, vuelven a tu mente para recordarte que hay mucho más después de la crisis, Bárcenas, el caso delos ERES fraudulentos o Oli Rhen en su asiento de UE.

Así que, definitivamente las castañas estarán presente (en su momento) en el puestecito de "Abuela a los 20" en el Soho y.....¡VIVA LA DESINFORMACIÓN! porque hacer "terapia de ignorancia informativa", de vez en cuando, es una bendición para el cuerpo y la mente.

2 comentarios:

  1. jajjaja me ha encantado el post, y que razon tienes!! A veces la desinformación es necesaria!

    Saludos desde Gelolas Vintage (moda vintage y antiguedades)

    www.modaonlinegelolasvintage.com/blog

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  2. ¡Qué razón tienes! A veces la felicidad de la ignorancia es de lo poquito que podemos disfrutar. El problema está cuando vuelves al mundo real y te encuentras con el chaparrón de malas noticias...

    Castañas...mmmm. Son las que dan la bienvenida al otoño,jajaja

    Un saludo,

    Marta, M.

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